La Ruptura

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Sociología

MASCULINIDADES Y FEMINIDADES

HACIA LA CONSTRUCCIÓN DE GÉNEROS MENOS POLARIZADOS Y MAS HORIZONTALES.

EQUIDAD VS IGUALDAD

REFLEXIÓN

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más que una imagen

viernes, 11 de abril de 2014

Avances del borrador de mi proyecto de tesis sobre masculinidades y una nueva manera de entender el quehacer sociológico



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La propuesta que se desarrolla en este estudio parte de un supuesto muy importante, que por el bien del conocimiento y la teoría, se debe de repensar. Este supuesto asume que el quehacer sociológico tiene dos niveles: 1) el nivel teórico-académico y 2) el nivel subjetivo-vivencial; es decir, como sociólogos pensamos como investigadores y como personas de la vida cotidiana, y de que no existe separación total de uno con el otro. El quehacer sociológico se alimenta y/o desarrolla de ambos niveles; de esto se deriva que hay un punto medio, un nivel intermedio que mimetiza lo formal teórico con nuestra propia forma de ver la realidad social. Es en este tránsito en que una nueva forma de analizar lo social surge, asumiendo de que nos encontramos en pleno auge de la posmodernidad y que somos testigos de la introducción de una nueva escala: el individuo y toda su subjetividad. Y al decir subjetividad no se niega que fuerzas y estructuras sociales aún influyan en los actores y sus conciencias sociales (individuales y colectivas).
De esta forma, la realidad y organización social han tomado un rumbo nuevo, ya bastante alejado de lo planteado por la modernidad y las instituciones desde la consolidación del sistema capitalista ene l siglo XIX, que daban forma y límite a los actores modernos. Hoy, se percibe una transición hacia algo que es distinto a lo moderno, y que se ha catalogado como la crisis de las instituciones modernas y occidentalizadas. En este proceso de transición, las dimensiones que constituyen la realidad social, en el sentido más amplio que pueda tener, se han ido complejizando y diversificando, de manera que la organización de la vida social requiere de la subdivisión de una variedad de aspectos sobre el cual el actor ‘posmoderno’ reconfigura su identidad y conciencia social. Por consecuencia, un segundo supuesto es que la transición de lo moderno a los posmoderno implica reconfiguraciones del nuevo actor social, pues la nueva escala de acción e interacción es el individuo y su subjetividad, y lo que implique esto último en el contexto que señala que somos participes de una sociedad red, de carácter global, consumista y capitalista.
Una de las dimensiones que ha ido tomando relevancia en las ciencias sociales en general es el horizonte del género, el cómo mujeres y hombres como actores asumen y construyen su realidad social en relación a sí mismos y en oposición a otros.
En pleno siglo XXI se vienen dando procesos sociales bastante complejos que significan un cambio en el modo de percibir y captar la realidad social, pues la organización social de hoy tiene una nueva escala e intensidad, aunque sigan persistiendo fuerzas y elementos propios del sistema del que somos parte. Estos cambios aluden, y tienen la misma importancia, a las maneras de como hombre y mujeres representan su género, su identidad y conciencia. Se debe aclarar que el género como una construcción sociocultural, aprendida, internalizada, socializada, representada, interactuada, etc. Es un horizonte, pues tanto la feminidad como la masculinidad representan una diversidad de expresiones más o menos diferenciadas. Por lo tanto, la masculinidad y la feminidad son de carácter plural. Asimismo no debe cerrar el supuesto que están emergiendo nuevas formas, cada vez más diferenciadas y opuestas propuestas por los individuos y los nuevos valores que guían la acción y delimitan el nuevo campo de acción en la sociedad contemporánea.
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jueves, 10 de abril de 2014

La autoruptura Individuo/realidad

#Rupturas
En mi proceso de formación como estudiante universitario de una ciencia social como la Sociología, descubrí que una de las rupturas más importantes es la que tiene que ver con el 'quehacer sociológico': la 'autoruptura individuo/realidad'. A las Rupturas epistemológica y metodológica que dan sentido y criterio al proceder de la compleja disciplina sociológica, considero que el más importante, y como ya mencionaron algunos sociólogos incluidos algunos clásicos, es el paso 'de adentro hacia afuera' que debemos dar cuando intentamos aprehender una realidad en particular que le compete a la Sociologia dentro de su campo de estudio; y es que esta ciencia es tan compleja, que seguir manuales al pie de la letra podría resultar improductivo; cuando en el fondo sabemos, o al menos intuimos, que hacer y practicar sociología tiene que ver con dos niveles: 1) el nivel teórico-académico, y  2) el nivel práctico-vivencial. De esto, en mi opinión, surge lo que es en sí misma la Sociología, pues el carácter de la Sociología está entre lo que teorizamos y lo que vivimos; aquí se dan las características que se le otorga ala Sociología: reflexiva, explicativa, transformadora, comprometida, científica, crítica, espontánea, artística, etc... Hay y habrá Sociología en la medida que el paso de ruptura que demos esté entre ambos niveles. Un nivel medio o de transición que posicione a los sociólogos y su quehacer dentro de la compleja realidad del mundo posmoderno.

Luis Vasquez (LAVS)
Bachiller en Sociología (UNMSM)